El Junior de Barranquilla, equipo que estaba estrenando técnico, a raíz de la salida de Norberto Peluffo, por los malos resultados que presentó en sus últimos compromisos, siguió en la senda de la derrota, al perder con el America de Cali, dos goles contra uno.
Quienes estuvimos en el Estadio Metropolitano, alrededor de unos 15 espectadores, coincidimos en que la situación por la que atravieza la institución rojiblanca es de actitud en el terreno de juego. Vimos a un equipo muy endeble, practicamente que entregado a su suerte, falto de física y guapeza a la hora de disputar el esferico.
No sabemos en realidad a que jugaron Leonardo Rojano, Emerson Acuña, Daniel Machacón y Javier Florez, a muchos de ellos los vimos realizar algunos pases donde medio inquietaban al equipo de Cali, pero cuando se necesitaba la profundidad y depositar el esferico en los pies de los hombres de ataque, lamentablemente este era mal dirigido y no luchaban para recuperar el balón, se veían completamente agotados.
Pero, otra cosa sucedió con el joven lateral izquierdo Yonal Rivera, debutante en el equipo tiburón, este jugador demostró que tiene un gran porvenir en sus pies, lo vimos proyectarse hacia adelante en varias ocasiones, sacando a rivales y realizando buenos pases, uno de ellos fue tomado por Eudalio Arriaga, siendo este derribado en las 18 yardas yel arbitro decretó la pena máxima al minuto 25 del primer tiempo,para poner al Junior en ventaja, en los pies de Haydar Palacio.
Pensamos que desde ese instante el Junior, cayó en un marasmo futbolístico y se olvidaron de las instrucciones que les debió impartir su nuevo técnico.
Arrancó el segundo tiempo y muchos pensamos que Jorge Alcazar, iba a realizar los cambios que urgentemente necesitaba el equipo en la media cancha, pero no fue así y se continuó con la misma nómina.
El gol americano, aparece al minuto dos del segundo tiempo, un tiro libre bien ejecutado por Pepe Moreno, al dar en un defensor juniorista, descoloca al arquero Carlos Perez y se va a lo profundo de la red.
Sigue el equipo jugando con desgano, obtienen la pelota avanzan un cuarto de terreno y pierden el esferico y no tratan de recuperarlo. Es asi, como en el minuto 19, Leyner Rolong, pierde un balón con el argentino Gancedo, este se desplaza saca a un defensor y dispara para enviar a lo profundo el balón en el arco del arquero Carlos Perez, quien intentó desviarlo, pero la pelota se introdujo ante la mirada atónita de los espectadores.
Ante esta nueva derrota, hay que darle un compas de espera al señor Alcazar, ojala replantee una mejor nómina para el proximo compromiso ante el Cucuta Deportivo.
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